Gran Salmo

1 Si el Señor no es el constructor de la casa, de nada servirá trabajar en la edificación. Si no es el Señor quien vigila la ciudad, de nada servirá que el centinela haga guardia.

2 De nada servirá levantarse temprano y dormir tarde, trabajando duro para conseguir comida. El Señor da sueño a los que ama.

3 Herencia del Señor son los niños, recompensa que él da.

4 Como flechas en las manos del guerrero son los niños nacido en la juventud.

5 ¡Qué feliz es el hombre que tiene su aljaba llena de ellos! No serás humillado cuando te enfrentes a tus enemigos en la corte.

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Última actualización el 5 de julio de 2024

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